jueves, 3 de mayo de 2007

Atados.

Tómame la mano
sin parar,
que pronto te diré
cual es nuestro destino
Tómame la mano para perder
mis temores
y ver en tus ojos
la felicidad

Si esta escrito que te perderé,
tómame la mano mi amor
para retar al destino
Tómame la mano
sin parar
y leer en tus manos
nuestro camino.

Tómame la mano
y dame una esperanza
Si esta escrito que te perderé,
dame tus manos
sin parar
para albergar la dicha
de encontrar
un mañana.

Tómame la mano
mi amor
y no dejes que la muerte te lleve
Dame la esperanza
para estar a tu lado,
dame la esperanza
para ser feliz.

Tómame la mano
para cumplir nuestro destino.

No quiero soltar tus manos
porque cuando te pierdo;
me pierdo a mi mismo

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuando lo leiste en clase me impresionó este poema. Ahora que lo puedo leer y analizar con mayor detenimiento, me puedo percatar de su virulencia. Es alucinante.

Anónimo dijo...

no perdemos a nosotros mismos cuando perdemos a quién amamos. me parece muy sentimental auqnue no te niego que exiten muchas partes que me gustan tal vez por que lo que dices es verdad.