jueves, 9 de agosto de 2007

Encuentro

La luz del atardecer que se filtra a través de las nubes y los rayos del sol que se reflejan en el mar subraya el destino final. Los colores son luminosos, las líneas no nos conducen a ningún lugar en particular, ya que pueden ir de adentro hacia fuera o viceversa. La organización de la superficie pintada en escalas de distintos colores brinda la ilusión de profundidad. Existe en la casa un alineamiento de cerca.
La ventana que da a la habitación nos acerca y nos aleja del lugar. A través de la ventana abierta se ve tres testigos de la escena. Sobre un sofá de terciopelo rojo yace una victima desnuda. Todos permanecen inmóviles y da la impresión de que los acontecimientos también quedan suspendidos, sin resolverse.
La puerta esta semi abierta y decido entrar en la habitación, pues el olor hediondo que se propaga en la atmósfera me ha atraído. Al entrar, siento una yuxtaposición turbadora entre lo corriente, lo extraño y lo erótico: me sinto mortal.
El cielo y la tierra parecen fundirse. Miro tras la ventana del cuarto, el azul intenso del cielo que es matizado por el sol del ocaso, y que ahoga sus últimos rayos en el mar. El destino parece simbólico, pues la gloria puede ser sucedida al fracaso
Me siento en la cama frente al sofá, incomodo, en una posición tensa cruzando los brazos para tratar de cubrirme. Los objetos cotidianos que circundan la habitación se funden en la composición de si misma dotando al cuarto de una gran fuerza, a pesar de la aparente vanidad. Me pongo de pie delante del cadáver, la sombra que proyecta la habitación, sombra violenta, desproporcionada, amenazadora; contribuye a desarrollar el clima de angustia que emana del cuerpo. La naturalidad del cadáver me remite a la Venus inmortalizada. El contorno del cuerpo aparece delineado resaltando la voluptuosidad de la postura modelada por luces y sombras.
La habitación es sombría, no por la ausencia de luz, sino por la presencia de la oscuridad. Sobre un fondo veo oscuras formas indefinidas en incesantes movimientos, que parecen metamorfosearse en el vasto espacio de la habitación. El cadáver de mujer aparece como desnuda con un crucifijo en la mano, alejando las tentaciones que le sobrevienen, al fondo están los otros, uno de ellos lleva un obelisco con rasgos medievales, el otro aparece con una mujer en la mano desnuda y voluptuosa, y el último (el que está en medio) lleva sobre sus espaldas una construcción arquitectónica, a través de cuya puerta abierta se ve un torso femenino desnudo. Los tres seres amorfos, híbridos, con rasgos humanos, pero con forma de pájaro, aparecen conformando un triángulo, arriba de ellos veo un cuervo negro de plumaje brilloso. El pájaro tiene una connotación ambivalente, es malvado y tierno, demoníaco y tímido, y puede representar la amenaza o la liberación.
Puedo distinguir al que está en el medio. Al menos puedo ver su rostro; veo la metamorfosis de su rostro desfigurado y torturado, sobre su fondo oscuro distingo una cara angulosa y deformada. La desnudez del espacio subraya su soledad. A su derecha sigue el que lleva un obelisco con rasgos medievales, a su izquierda el otro con una mujer en la mano desnuda y voluptuosa. El del medio me mira fijamente, me mira y se dilata en mi pupila, ¡escalofrió pavoroso! ¡Perplejidad! ¡Obnubilación! ¡Incertidumbre! ¡Pánico! ¡Espanto! ¡Terror!... he reconocido al del medio, se quién es el del medio.
Una sensación de angustia se desprende de mi alma cuando veo sobre mis espaldas una construcción arquitectónica, a través de cuya puerta abierta se ve un torso femenino desnudo. A mi izquierda está el que lleva un obelisco con rasgos medievales, a mi derecha se encuentra el otro que lleva una mujer en la mano desnuda y voluptuosa, y delante de mí veo un gran espejo misterioso y despoblado en el que se desenvuelven seres fantasmales en un espacio sin límites y que capta mi imagen.

5 comentarios:

Gonzalo Del Rosario dijo...

"La habitación es sombría, no por la ausencia de luz, sino por la presencia de la oscuridad"

Oe es un cuento tan oscuro, como para filmar un corto.

Me recordó a "La invensión de Morel" . . .

Garo dijo...

ES un cuento sombrío interesante; no obstante a veces tienes trabas con las palabras; tal vez x la falta de correción.

Gonzalo Del Rosario dijo...

Apura pe muchachón cuándo posteas otro peee

Ricardo Calderón Inca dijo...

YA LO LEI COMO 5 VECES Y AUN ASI ESTOY A MEDIAS ENTENDIENDOLO, AUNQUE ME PARECE MUY MACABRO LA TEMATICA ME PARECE COMO DICE GONZALO QUE PUEDE SER PARA UN CORTO UHHMMM... YO LO PROTAGONIZO PE!!! =)

Gonzalo Del Rosario dijo...

Oe ya pe ¿cuándo publicas el "Castillo de arena"?

Estoy ansioso por leerlo.